22 mayo 2023
Nuestras balsas cumplirán una función esencial en esta campaña de riego para lograr el mejor aprovechamiento posible de los escasos recursos disponibles. Sin estas obras de regulación, y sin todo el gran proyecto de modernización de nuestra Zona Regable, los efectos de la situación hidrológica serían aún más graves.
Pero, las balsas no solo nos han ayudado a lidiar con la falta de precipitaciones durante la campaña de riego sino también fuera de ella.
De hecho, gracias a las balsas, en los tres últimos años, se ha podido mantener el suministro prácticamente durante todos los meses en los que ha sido necesario por la ausencia de precipitaciones, atendiendo la demanda de nuestros cultivos.
Así, desde final de la pasada campaña, en octubre y noviembre se mantuvieron las estaciones de bombeo arrancadas en días alternos, con jornadas de doce horas, hasta que a final de noviembre nos quedamos sin recursos. Pudimos restablecer el servicio, una vez quedaron las balsas llenas con las lluvias de principios de diciembre, lo que nos ha permitido prolongar el servicio de riego, otros dos meses, hasta finales de marzo, en esta ocasión con dos días riego a la semana y con jornadas de ocho horas diarias.