13 octubre 2017
Como ya informamos el mes pasado, nuestra Comunidad está estudiando la instalación de una planta solar fotovoltaica conectada a la Red con la que alcanzar el casi total autoabastecimiento energético. El proyecto sigue adelante a pesar de la clara penalización que el llamado impuesto al sol supone para este tipo de instalaciones, que son desde luego las que mayor beneficio ambiental aportan.
La penalización impositiva de las instalaciones conectadas a la Red hará que el regadío apueste de forma mayoritaria por las plantas aisladas (algo no posible en nuestra Comunidad porque necesitamos regar de noche). La gran paradoja es que de esta forma se fomentará el autoabastecimiento por parte del regadío, pero no se promoverá al máximo el uso de energías limpias, pues gran parte de la energía sobrante en las épocas que menos se riega no se volcará a la red, sino que se quedará sin usar.
Dicho de otra forma, el impuesto al sol, y el desarrollo de plantas aisladas al que este conduce, hará que se desaproveche una buena parte de la energía producida. Sabemos que tanto Feragua como Fenacore vienen demandando la supresión del impuesto al sol para el regadío. Y si realmente quieren favorecer las energías verdes en la agricultura de riego, las administraciones deberían tomar buena nota y realizar las correcciones pertinentes.