10 febrero 2020
Tras las lluvias de la cuarta semana de enero, la situación hidrológica de la Cuenca no ha experimentado una variación significativa. Los embalses de la Cuenca del Guadalquivir están al 47% de su capacidad en tanto que los del Sistema de Regulación General se encuentran algo más del 40%, es decir, apenas un punto por encima de cómo estaban antes de esas últimas lluvias. El sistema del que depende el Valle Inferior sigue, pues, en estado de alerta y en una situación peor que la del año pasado (entonces estaba al 46%), cuando se daba por probable un escenario de restricciones.
Y en este contexto llega la Comisión de Desembalse de la CHG, que se celebrará el próximo 3 de marzo. Allí conoceremos con más precisión cuáles son las previsiones del organismo de Cuenca para la próxima campaña, en la que, si las lluvias primaverales no lo remedian, tendremos dotaciones deficitarias. Seguiremos informando.