31 enero 2022
Si hace unos días nos hacíamos eco de la siembra de la patata en nuestra Zona Regable, que tuvo una buena campaña en 2021, en esta ocasión nos hacemos eco de la recogida de la naranja, que desgraciadamente se está enfrentando a una campaña nefasta, con precios bajo mínimos que ni siquiera cubren los costes de producción.
El motivo principal, el solape que se ha producido con la naranja procedente del Hemisferio sur, que ha llegado a nuestro mercado con meses de retraso. Lamentablemente, los mercados están dando preferencia a las miles de toneladas de naranja vieja de Sudáfrica que no pudo ser desembarcada hace unos meses, hundiendo el precio de las variedades que se han recolectado hasta ahora en Andalucía. Ahora le toca el turno a las Lane, Tango y Powel... entre otras, a ver si la tendencia cambia.
Como siempre ocurre, la gran paradoja es que de ese descenso de los precios no llega a los consumidores, que siguen pagando lo mismo por naranjas recolectadas hace varios meses a miles de kilómetros de distancia.
Por ello, desde la Comunidad, nos sumamos a las organizaciones agrarias que están solicitando a los consumidores que miren las etiquetas y den preferencia a la naranja de aquí, no solo por el hecho de ser de aquí, sino porque es de ahora y es de mayor calidad, cumpliendo con unos estándares sociales, laborales y medioambientales muchos más exigentes que los de la que se produce fuera de la Unión Europea.